¡Muy buenos días, queridos followers! 

Hoy hablaré de cómo se expresan las sexualidades. Sí, la sexualidad tiene múltiples expresiones y diversas formas, no hay solo una forma de ver y concebir la sexualidad. De hecho, parte de la problemática de que algunas expresiones sean consideradas raras o fuera de la norma o de que se crea que todo es una patología, es porque algunas personas consideran que está fuera de los límites, lo cual veremos que no es así. Es por ello que en el día de hoy hablaremos de las posibilidades en las que puede manifestarse la sexualidad humana.

Lo primero de lo que hablaré es de los objetivos que tiene una relación sexual para el ser humano, refiriéndome al coito:

1. La simple descarga fisiológica en un momento en el que el deseo sexual está muy elevado.

2. La relación sexual como objetivo de incrementar el ego, en mayor proporción que recibir satisfacción sexual.

3. Una relación sexual por el simple hecho de recibir placer entre dos personas que se atraen.

4. Demostrarse afecto entre dos personas que se quieren.

Como siempre digo, las formas de expresar nuestra sexualidad son tan diversas como personas hay en el mundo. Para cada quien se vive de forma distinta, inclusive varía la forma de vivirse individualmente, con pareja, o inclusive hablando del mundo liberal con otras parejas, con chicos, con chicas.

Uno de los principales componentes de la sexualidad es el pensamiento, aquí entran en el juego las fantasías, tanto las que llegan solas, así como las que recreamos después de alguna vivencia anterior o bien alguna fantasía que creamos nueva con imaginación por completo.

Para que exista el deseo, la primera fase de la respuesta sexual humana, hace falta una adecuada disposición emocional y afectiva en muchos casos, también la parte fisiológica debe de estar sana.

Aunque ya he hablado de fantasías sexuales anteriormente, recordemos que las fantasías permiten a las personas tener un lapso en el que se puede vivir una realidad alternativa, recreando o imaginando situaciones sexuales.

Algunas que solo serán producto de la imaginación porque no desean llevarse a cabo, otras que quizá hay un profundo deseo de probar en algún momento de la vida. Dentro de estas fantasías podemos encontrar aquellas que prevalecen a largo plazo, que algunas personas creen que les han acompañado casi toda su vida, existen otras a corto plazo, que inclusive son momentáneas y aparecen por fases de la vida.

Os hablaré de una clasificación de las fantasías según el Instituto andaluz de sexología y psicología, es interesante que podáis ver como existen diversas situaciones que pueden llegar a estimular la erótica, el deseo sexual y van diferenciando nuestras diferentes sexualidades.

Vinculares: En este tipo de fantasía se piensa en escenarios diferentes con formas variadas de contactar con la persona que se mantiene un vínculo afectivo, comúnmente suele ser la pareja. Pueden subdividirse también en actividades y conductas sexuales que no desean realizarse, o aquellas fantasías que se recrean basadas en experiencias pasadas satisfactorias y que además se le agrega un extra a lo que ya se ha vivido.

Extra vinculares: Este tipo de fantasías se basan en parejas distintas a la habitual, pueden incluir personas con las que nunca se ha tenido contacto y existe una fantasía de tenerlo, personajes famosos, personas creadas en la propia imaginación, personas que ya conocemos y con las que ya se ha tenido contacto pon una relación sexual y vuelve a recrearse la situación.

Grupales: Aquí tenemos las fantasías que albergan las no monogamias, desde swingers a sexo grupal, esta fantasía puede incluir a la persona en cuestión, pero también la fantasía de ver a su pareja interactuando con una o varias personas más.

Homoeróticas: Este es el tipo de fantasías en las que la persona interactúa con alguien de su mismo sexo. Aunque a muchas personas esto puede ocasionarles temor a tener una orientación sexual homosexual, no siempre es el caso, puede ser un componente importante en la erótica de las fantasías, pero que resulta diferente cuando es llevado a la realidad.

Parafílicas: Aquí se incluyen todas las temáticas que se encuentran enmarcadas dentro de las parafilias como los fetichismos, juegos de rol, sadomasoquismo.

Pseudoagresiones: Dicho apartado engloba aquellas fantasías como la violación, un ataque sexual por alguien que le despierta erótica del poder, o una persona por la que siente profunda admiración.

Con la clasificación anterior os podéis dar cuenta que lo que excita, estimula y genera deseo puede ser muy diverso, inclusive la sexología en general puede tener grandes grupos para las clasificaciones. Pero quienes nos dedicamos a las eróticas alternativas podemos percatarnos de que el constructo de lo que nos excita puede ser mucho más específico. Por ejemplo, puede haber personas a quienes les estimule el tipo de fantasías grupales; sin embargo, si eligen canalizarlo y combinarlo con pornografía, puede ser que busquen vídeos de sexo grupal únicamente en ambientes muy cuidados, quizá con una vestimenta fetichista, con máscaras y un ambiente sensual, cuando, por el contrario, sexo grupal en un descampado podría no interesar nada o hasta disminuir el deseo.

Una gran ventaja de las fantasías como componente de la sexualidad es que, a diferencia de la pornografía, podemos manejarlas a nuestro antojo. Es decir, agregar o quitar todos los componentes que se deseen para hacerlo placentero, inclusive si traemos un recuerdo del pasado que fue estimulante y altamente erótico, puede agregarse a la fantasía otro tipo de prácticas y adornar esa historia de manera que sea perfecta en nuestro contexto de la sexualidad.

Como ya hemos hablado, las fantasías son un componente muy importante para el placer individual, pero también para el placer que se comparte con otra persona. Además de contribuir a los mecanismos del placer, los sexólogos también utilizamos mucho en la terapia, puesto que induce y aumenta la excitación, por lo cual puede ser una herramienta muy importante en el tema del deseo, excitación, duración, erección, etc. Por lo tanto, también es una herramienta muy relevante como una distracción cognitiva, evidentemente debe trabajarse con aquellas fantasías que forman parte considerable de nuestra sexualidad individual.

Lo antes mencionado forma parte del descubrimiento individual y personal, seguramente mientras habéis leído el artículo ha llegado a vuestra mente el tipo de fantasías, sueños y estilos de estímulo que forman parte de vuestra sexualidad.

No obstante, seguiremos hablando de este tema en un siguiente Post, ya que todo aquello que conforma nuestra sexualidad es muy diverso.

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Besos y hasta la próxima.

‌Gret de Lou