¡Hola!

El día de hoy hablaré de un tema bastante interesante: la tutoría dentro de las eróticas alternativas.

Gran parte de mi trabajo en lugar de llamarse terapia debería de llamarse tutoría, consultoría o como algunas personas les gusta llamarle coaching. Esta última no me agrada demasiado, ya que es un término que han acuñado personas no profesionales, es decir, que no tienen un título o certificación en la materia, pero que al considerar que tienen buenas prácticas se sienten con la capacidad y habilidad de instruir a otros. Esto a la larga resulta peligroso y contraproducente. Un profesional en materia de Shibari hace unos días precisamente me comentaba que no es lo mismo que yo salga a probar un coche por la ciudad sin tener carnet de conducir, pero que tenga suerte y no me pase absolutamente nada y de ahí me crea con la capacidad de poder enseñar a otros a conducir un coche.

Es un ejemplo muy sencillo, pero real. Muchas personas van por el mundo, por ejemplo practicando Bdsm, Shibari u tras eróticas alternativas y aconsejando a los demás, vendiendo cursos y talleres que pueden causar daños en la mente en el futuro. Otros sí que tienen buenas prácticas, pero el saber enseñar tiene su propia formación y habilidad, y no se diga en los casos que no requieren un coaching, sino una consulta guiada por un profesional.

Para poder ser tutor, profesor y dedicarse a la enseñanza en la mayoría de las áreas uno debe de tener una formación pedagógica, en otras inclusive del área de la salud y en el tema que nos atañe el día de hoy, por supuesto una formación seria en sexología.

Ahora bien, os contaré del trabajo de un tutor o una tutora.

Una tutoría se refiere a un acompañamiento profesional, en este caso en temas de mundo liberal o relaciones abiertas, Bdsm, conocimientos acerca del placer, la erótica, fetichismo y un mejor desarrollo de la sexualidad.

Lo primero es la adquisición de conocimientos serios basados en la evidencia. A veces puede ser un poco tedioso que muchas personas comiencen un proceso de tutorías porque quieren llevarse información práctica inmediata para resolver conflictos y resultados pronto. Sin embargo, nuestra mente se encuentra programada con muchos conocimientos erróneos que se encuentran en las redes sociales, programaciones que nos han compartido nuestros antepasados, inclusive personas cercanas que también tienen información errónea. Por lo tanto, lo primero es brindar información y conocimientos fiables que nos ayudarán a hacer un borrón y cuenta nueva en nuestra mente y avanzar desde el conocimiento y la verdad.

Dentro de todos estos conocimientos básicos, tu tutor te guía en cuanto a lecturas, películas, artículos con contenidos imprescindibles que reforzarán todo aquello que quieres desarrollar. En ese proceso se aclaran dudas, y se comentará acerca de los conceptos revisados en estas herramientas.

También el enseñar en cuanto a las normas, costumbres de la subcultura o Lifestyle que queramos explorar, seamos conscientes que si decidimos adentrarnos en el mundo del Bdsm es toda una subcultura, que se debe aprender para hacer todo de forma correcta, en el mundo liberal también, como lo hemos comentado en artículos anteriores.

En mi trabajo como tutora me gusta conectar, introducir a la gente en el mundo liberal o en el mundo Bdsm, acudiendo a fiestas, reuniones, lo cual ayuda a conectarles y socializar mejor. Este acompañamiento es fundamental al principio, les ayuda a sentirse mucho más seguros y evita pasar por malas experiencias.

Todo esto incluye un acompañamiento y un asesoramiento a los primeros contactos y cómo hacerlos en los chats, como identificar personas que son falsas dentro del mundo Kink, tanto en la parte liberal, Bdsm, juegos de rol y otros fetichismos.

Ayuda a tener un mejor desarrollo y éxito, ya que ayudamos a crear perfiles adecuados en redes sociales y páginas de contactos.

A nivel más profundo, siempre se van desarrollando distintos temas a tratar de índole más terapéutica y personal, lo cual ayuda a tener un desarrollo personal y crecimiento del propio ser, resolviendo problemas que se pueden suscitar en el camino; desde celos, comunicación, culpas, negociación, relaciones, etc.

La realidad es que en este camino van surgiendo muchas emociones, pensamientos, crisis de crecimiento personal, pero también crisis por algunos momentos de reflexión y difíciles en algunos días, algunas veces desacuerdos en la pareja, otras maravillosas experiencias y otras no tan positivas. El poder tener un mentor que nos ayude de forma profesional siempre nos ayuda a reflexionar y obtener lo mejor de cada situación para un aprendizaje real, viviendo cada día mejores experiencias.

Finalmente, por experiencia me doy cuenta de que con el tiempo, aunque deje de ser tutora o mentora a nivel individual o de pareja, hay personas con las que creamos los más bonitos lazos de amistad, compartiendo un camino de vivencias y experiencias por el mundo de las eróticas alternativas.

Hasta la próxima.

Gret De Lou